Por Bachi Martinez.
Fue el día del maestro, un maestro es una persona comprometida con la sociedad para educarla. Pero quiero definir lo que es para mí la educación. Ser educado, ser formado, quiere decir poder ser libre, poder elegir, poder pensar libremente, pensar como es uno, y no como nos condicionan.
Si uno no está formado, no sabe, es manipulado fácilmente; al no saber, uno se cree todo, las verdades, las mentiras. Por eso es tan importante para mí la educación, porque te da la libertad de elegir, de dudar, de buscar nuestra propia verdad.
Cuando uno es niño, tiene la cabeza vacía de conocimientos, por lo tanto, es muy importante la formación básica, los primeros conceptos introducidos en los niños. Por eso el trabajo de educar requiere de paciencia y mucha responsabilidad. Y no nos educan solo los maestros y los profesores, todos somos educadores todo el tiempo, en la calle, en las casas, con nuestos familiares, amigos, todo el tiempo estamos aprendiendo y educando a la vez, porque yo pienso que la formación de las personas nunca termina, todos los días aprendemos cosas nuevas.
La principal responsabilidad para educar es hacerlo bien, y para mí, la mejor manera de formar es enseñar a legira, a mostrar todas las opciones, y que cada uno elija libremente. Dejar en claro que la libertad trae atada la responsabilidad. Se trata de la libertad, el mayor humano, el que tenemos desde que nacemos hasta que nos morimos.
La libertad de elegir es la libertad de ser, de poder ser.
La eduación es fundamental para la prosperidad de los pueblos. Un pueblo sin educación es fácilmente manejable, manipulable; en cambio, los pueblos formados son los que se plantan en defensa de lo suyo y de sus convicciones. Porque en definitiva de eso se trata ser educado, se trata de saber defender en lo que creo, por qué lo creo. Estar convencido de eso, y no renunciar nunca, nuestras convicciones e ideales son los que nos hacen, en gran parte, lo que somos.
Pero con ideas y convicciones no se hace mucho, hay que llevarlas a la práctica, y ahí se ven los principios de cada uno. Lo más importante de nosotros es lo que hacemos, no lo que decimos.
Tenemos que tener muy en claro que la teoría no es la práctica, siempre y obviamente esta última es la más compleja, por la simple razón de que en la teoría, en las ideas existe el idealismo, la perfección, y en los hechos, nada de eso está presente en ningún momento. Con esto no quiero que se mal interprete que no hay que tener ideas, todo lo contrario, hay que tener muchas ideas, y debatirlas, compartirlas, para poder defenderlas de la mejor manera: llevándola a la práctica.
El debate de ideas crea mejores ideas, por el simple hecho de que escuchar otras voces que a lo mejor están o no de acuerdo con tus ideas, te hacen abrir la mente y pensar un poco más, entonces se puede corregir antes de la acción.
Estoy convencido de que cuantas más voces se escuchan, se llega a una mejor conclusión.
Este tipo de cosas son las que creo que son fundamentales en la formación desde chicos.
Si no nos formamos correctamente nosotros los jóvenes, nunca vamos a poder cambiar las cosas, nunca vamos a participar en nada. Por eso hay que aprovechar este momento, el momento de nosotros los jóvenes, los que tenemos la fuerza y la pureza de la juventud, la misma, unida, puede hacer lo que se proponga. Tenemos que asumir el compromiso y la responsabilidad que cae en nosotros, los que queremos y soñamos con una Argentina en serio. No bajemos nunca los brazos, basta de creer en los malditos mensajes que quieren inculcar en la sociedad los medios de comunicación: la juventud no está perdida. Nos quieren hacer quedar como los criminales, cuando nosotros las únicas armas que usamos son el díalogo y el respeto, llevando siempre en alto las banderas del amor y la paz.
No renunciemos nunca a nuestras convicciones, y no bajemos nunca los estandartes de la liberación, de la independencia, de la justicia, del amor y la paz.
Yo, como un joven más, creo en la fuerza de la juventud, pero es imprescindible que vaya de la mano de la democracia, con el respeto, con la educación.
Creo en esa fuerza capaz de movilizar un pueblo entero para luchar por un fin común.
Nosotros somos los responsables de que el cambio siga en marcha, y que sigamos creciendo. No nos dejemos desmoralizar, tenemos que saber defendernos, por eso insisto en la formación. No podemos dejar pasar esta oportunidad, somos nosotros los que tenemos la fuerza para que no baje los brazos ningún compañero.
Porque como dijo un GRAN compañero: cuando la juventud se pone en marcha, el cambio es inevitable.
Jp Peronismo Militante Echeverria
No hay comentarios:
Publicar un comentario